Castilla y León cuenta con 238 de los 3.856 puntos públicos de recarga de coches eléctricos que hay en España, que le sitúan como el quinto país del mundo en este tipo de instalaciones, después de EEUU, Francia, Alemania y Holanda, según datos de UniEléctrica.
Independientemente de las cocheras de bloques de viviendas en las que la nueva legislación ha facilitado que se instalen puntos de recarga para particulares de coches eléctricos, mucho habrá que trabajar para sustituir hasta el 2040, año tope que ratificó recientemente la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, un parque de turismo de 22,87 millones de vehículos a gasoil (13,04 millones) y gasolina (9,82 millones) en vehículos eléctricos.
Un reto aún más complejo si se tiene en cuenta que al iniciarse el 2017 (último periodo oficial recogido por el INE) solo existían en España 17.614 turismos sin motores de combustión (incluyendo híbridos y gas) y que desde entonces, y pese al aumento registrado en 2017 y 2018, solo exista en España en la actualidad 3.856 puntos de recarga públicos para este parque de vehículos cuyas recargas son frecuentes por su aún limitada autonomía y relativamente prolongadas en el tiempo.
Por comunidades autónomas, Cataluña supone la cuarta parte de los puntos de recarga de todo el territorio nacional, con 939, la mayoría de ellos centralizados en el entorno de la ciudad de Barcelona (641), mientras que en Madrid la web especializada tiene registrados 453 puntos de recargas. En la lista les siguen Baleares con 401 puntos para repostar las baterías eléctricas, Valencia (353), Andalucía (346), Castilla León (238), Canarias (186), País Vasco (138), Galicia (137), Murcia (120), Aragón (105), Castilla La Mancha (104), Asturias (102), Extremadura (82), Navarra (67), Cantabria (50) y La Rioja (30), quedando 5 puntos de recarga en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.