La Diputación de Segovia ha celebrado la entrega del trigésimo cuarto Premio Internacional de Poesía Jaime Gil de Biedma, del que ha sido ganador Santiago Alba, con su poemario 'Caídas', en un acto en el que se ha anunciado la creación de un premio a autor joven para la próxima edición del 'Gil de Biedma' en 2025.
El presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, ha saludado al ganador y a la merecedora del accésit, Carmen Palomo Pinel, que ha sido premiada por su obra 'Ramos de mirto en la ciudad eterna'.
De Vicente ha recordado que el pasado año el premio sufrió una considerable caída de propuestas, en gran parte debido a la variación electrónica incorporada para participar. El presidente provincial ha comentado que "a partir de ahí, se imponía el trabajo para que este año hayan vuelto a ser más de seiscientas personas hispanohablantes -o mejor, hispanoescribientes- de todo el planeta las que hayan tomado parte en la convocatoria".
El coordinador del jurado, Juan Manuel de Prada, ha aplaudido la "calidad excelente" de las obras presentadas a esta edición y ha calificado los dos libros seleccionados como "magníficos, diversos pero riquísimos ambos".
Santiago Alba ha tomado el testigo de Luis Alberto de Cuenca como ganador de un premio que está dotado con 10.000 euros. Miguel Ángel de Vicente ha elogiado el trabajo del prejurado y del jurado del certamen, coordinados por María Antonia de Isabel Estrada y Juan Manuel de Prada, en un premio que la Diputación lleva impulsando desde 1991. Sobre la obra ganadora, además, ha aludido a pasajes como el "feliz instante en el que el delfín es pájaro, el guijarro es rayo o el amante es árbol".
Tanto Santiago Alba como Carmen Palomo han leído algunos de sus poemas tras recibir sus respectivos premios. El ganador ha "defendido la caída frente al duelo" y ha recalcado que la poesía puede ser el justificante de muchas emociones y sentimientos, pero "nunca puede mentir", además de reivindicar el papel de la literatura poética en un momento marcado por los conflictos y las guerras en distintas partes del mundo, con una alusión específica a la situación entre israelíes y palestinos.
Por su parte, Carmen Palomo Pinel, tras recibir su premio, dotado con 3.000 euros, ha recitado varios poemas de un conjunto que, en su condición de profesora de Derecho Romano, remite a esta disciplina legal, lo que ha conferido un alto grado de originalidad que ha tenido en cuenta el jurado, al igual que la riqueza léxica y sintáctica.
En el acto ha habido una nutrida representación de un jurado que, presidido por De Vicente, está compuesto por Luis María Ansón, Antonio Colinas, Asunción Escribano, Carlos Fernández Aganzo, Jesús García Sánchez, Fermín Herrero, Raquel Lanseros, así como los coordinadores Juan Manuel de Prada y María Antonia Isabel. Ese jurado decidió en mayo por mayoría que ‘Caídas’ fuera el poemario ganador de esta trigésimo cuarta edición de uno de los premios literarios más asentados y relevantes en lengua castellana, sobre todo en el ámbito poético.
El coordinador del jurado, Juan Manuel de Prada, ha anunciado novedades para la trigésimo quinta edición del premio internacional de poesía Jaime Gil de Biedma, en la que se va a suprimir el accésit (por lo que Carmen Palomo es la última persona en recibirlo) y, para sustituirlo, la Diputación de Segovia crea una nueva categoría, la del Premio Joven, como vía para potenciar la creación poética entre las nuevas generaciones y la promoción de talentos y jóvenes valores en el campo de la creación lírica.
